Arranque seguro con bujías de incandescencia MEYLE-ORIGINAL – incluso en pleno invierno
Hamburgo, 07.11.2017. MEYLE AG ofrece alrededor de 130 bujías de incandescencia MEYLE-ORIGINAL para todos los modelos corrientes: con las piezas fabricadas en su totalidad con arreglo a las especificaciones de los fabricantes de primeros equipos, MEYLE establece para los vehículos diésel de toda Europa una cobertura de alrededor del 90 por ciento. Adicionalmente, el fabricante hamburgués ofrece alrededor de 60 kits de unidades de control del tiempo de precalentamiento en calidad MEYLE-ORIGINAL que contienen, además de la unidad de control, las correspondientes bujías de incandescencia.
Las bujías de incandescencia sobresalen en el cilindro del motor diésel y se calientan a temperaturas de hasta +1.000 °C. Esta intensa temperatura es necesaria para permitir el arranque en frío de un motor diésel también en invierno a muy bajas temperaturas de hasta -40 °C. Con el fin de prevenir defectos y desgaste, las bujías de incandescencia MEYLE-ORIGINAL se fabrican conforme a las especificaciones de los fabricantes de primeros equipos – éstas incluyen el uso de metal resistente al calor y la tecnología de doble espiral de calefacción. En consecuencia, las bujías MEYLE-ORIGINAL tienen una transferencia de calor óptima y una alta capacidad de aislamiento contra corrientes de fuga o saltos de chispas. Además, el interior de la bujía es antihigroscópico – no atrae pues la humedad – gracias a una junta de goma especial, evitando corrosión en el interior. Gracias al uso de materiales de alta calidad y de componentes adaptados de forma óptima las bujías MEYLE-ORIGINAL mantienen con exactitud la temperatura predeterminada de postincandescencia. De este modo se reducen significativamente las emisiones de los gases de escape y se protege el medio ambiente.
Las bujías de incandescencia deben reemplazarse cada 80.000 a 100.000 kilómetros para evitar un fallo condicionado por el desgaste. Especialmente en otoño e invierno, cuando las temperaturas bajan, las bujías desgastadas pueden causar problemas de arranque serios y dar lugar a que un motor marche de forma irregular contribuyendo al aumento de emisiones de sustancias contaminantes y de humo.
El fallo de una bujía de incandescencia puede tener varias razones, como por ejemplo desgaste, montaje incorrecto, una unidad de control defectuosa o defectos de fabricación. Como consecuencia, las bujías se deforman, se rompen o incluso revientan; en tal caso pueden conducir a daños secundarios caros. Por ejemplo si las bujías no se pueden desmontar o – en el peor de los casos – si partes de la bujía entran en el cilindro y producen daños en éste.
Saber hacer de MEYLE: las especificaciones de las bujías de incandescencia MEYLE-ORIGINAL de un vistazo:
| Especificación | Ventajas |
|---|---|
| Conexión resistente a la corrosión | Garantiza un flujo de corriente seguro |
| Tecnología de doble espiral de calefacción | Tiempos de precalentamiento cortos, arranque en frío hasta -40 °C, postincandescencia óptima |
| Propiedades de aislamiento de los materiales utilizados adaptadas de forma óptima con respecto a la temperatura, al espacio de montaje y a la higroscopía (absorción de humedad) | Muy buena transferencia de calor, no higroscópicos, aislamiento contra corrientes de fuga o salto de chispas |
| Sellado de alta calidad en el interior | Evita el contacto con el aire, así como higroscopía y corrosión en las espirales |
| Tecnologías de soldadura láser, totalmente automatizadas | Conexiones fiables constantes entre la espiral de calefacción y la de regulación |
| Espiral de calefacción corta (en la punta de la bujía de incandescencia) | Arranque rápido (incluso a bajas temperaturas) |
| Empleo de componentes/materiales de alta calidad | La temperatura de arranque rápido puede ser mantenida después del arranque en frío gracias a la armonización óptima de los materiales. Con ello, las emisiones de escape se reducen de forma significativa. |
| Desarrollo y producción con arreglo a las especificaciones de los fabricantes de primeros equipos | Las bujías de incandescencia MEYLE-ORIGINAL se adaptan perfectamente, tal como las piezas OE |
| Fabricación ecológica y producción con ahorro de energía, sin cromo VI | No pone en peligro el medio ambiente durante la producción y el desechado |
| Comprobación del 100% | Producto comprobado |
Consejo de MEYLE para el taller: Reemplazar las bujías de incandescencia cada 80.000 a 100.000 kilómetros. MEYLE recomienda cambiar cada vez todas las bujías de incandescencia para evitar trabajos de reparación seguidos. Además, en caso de cambiar la unidad de control deberían cambiarse todas las bujías de incandescencia – así evitará que una unidad de control nueva sea dañada por una bujía de incandescencia defectuosa.
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