Filtros de aceite MEYLE. La mejor lubricación, poco desgaste y marcha extremadamente suave.
Los motores de gasolina y diésel se lubrican con aceite. El calor generado durante la combustión también hace que se queme parte del aceite. Sin embargo, un filtro de aceite tiene que rendir y soportar aún más para poder pasar siempre aceite limpio con propiedades lubricantes óptimas al motor. El aceite envejece con cada kilómetro recorrido, en los trayectos cortos queda combustible sin quemar, se forma condensación en el motor y en el aceite y, por último, pero no por ello menos importante, el filtro de aceite también está expuesto a los ciclos de calentamiento/enfriamiento.
Los filtros de aceite MEYLE de alta calidad se encargan de que los restos de aceite, la abrasión metálica y el hollín se filtren del aceite y no penetren en el bloque motor. El motor está siempre óptimamente lubricado, sigue siendo eficiente y funciona suavemente - sin ruidos molestos.

- Protección efectiva: los filtros de aceite MEYLE eliminan hollín, restos metálicos y residuos de aceite, lo cual protege el motor frente a daños y alarga su vida útil.
- Estándares de calidad estrictos: desarrollados y fabricados siguiendo especificaciones de los fabricantes originales y bajo controles de calidad estrictos a fin de cumplir con los requisitos del fabricante en cuanto a ciclo de vida.
- Funcionalidad fiable: gracias a sus valiosos materiales filtrantes y su ajuste perfecto, los filtros ofrecen un rendimiento fiable de forma continuada.
- Cobertura amplísima: con cerca de 177 referencias, nuestros filtros de aceite prestan cobertura a casi el 78,4 % del parque móvil europeo.
Importante: Cambie el filtro de aceite con regularidad.
Un aceite limpio significa menos desgaste, un rendimiento optimizado del motor y, por tanto, un funcionamiento económico y suave. Para garantizarlo, el filtro de aceite debe cambiarse cada año o cada 10.000 a 30.000 kilómetros, según las especificaciones del fabricante.